Un día va a haber una revolución y espero vivirla, apúntenme!
Un taxista me lo dijo hace ya un rato
«Pues bien: es necesario atreverse, —dijo un tercero. Cuanto más caprichosamente esté tejida la red que arroja el audaz pescador, tanto más abundante será la captura. Es menester, sencillamente, alentar a todo hombre para que prosiga su camino hasta donde le sea posible; bienvenido sea todo aquel capaz de tejer una nueva fantasía sobre las cosas.
Los discípulos en Sais. Novalis
La queja admirable de Van Gogh es el grito orgulloso y desesperado de todos los artistas. «Puedo pasar, en la vida y en la pintura también, sin Dios. Pero no puedo, enfermo, pasar sin algo que es mayor que yo, que es mi vida, la fuerza de crear».
¿Quién es ese salvaje, tan efusivo y amistoso? ¿Espera la civilización, o ya la ha dominado y dejado atrás? ¿Es alguien del suroeste, criado al aire libre? ¿Es canadiense? ¿Viene de las tierras del Misisipí? ¿De Iowa, de Oregón, de California? ¿De las montañas, de las praderas, de los bosques? ¿O es un marinero? Dondequiera que vaya, hombres y mujeres lo aceptan, y lo desean. Desean gustarle, que los toque, que les hable, que se quede con ellos. Su comportamiento no conoce normas, como la nieve cuando cae; pronuncia palabras simples como la hierba; va despeinado, ríe, es ingenuo, camina despacio, tiene facciones corrientes, modales y aires corrientes. Y todo eso se desprende, bajo nuevas formas, de las yemas de sus dedos e impregna el aire, con el olor de su cuerpo o de su aliento; todo surge de su mirada.
El primer sol y la primera nube
que asombraron mis ojos ¿cómo eran?
¿Cómo pude sentir, si no sabía,
el vago efluvio de la rosa abierta?
¿Qué rayo audaz atravesó mi sombra
y me infundió la luz de una experiencia?
¿Qué arquero de dolor hundió en mi vida
la envenenada punta de la flecha?
Cuando en gloriosa desnudez tendido
sorbía los aromas de la tierra,
¿quién me vino a decir <<estás desnudo>>,
y me arrojó un harapo de conciencia?
A mí mismo. Enrique González Martínez
Los debates abstractos tienen sus límites y , en cambio, las teorías acerca del diseño dependen, en parte, de su materialización en productos "reales".
Del libro "Diseño de la información" de Paul Mijksenaar.
La torre de marfil tentó mi anhelo; quise encerrarme dentro de mí mismo, y tuve hambre de espacio y sed de cielo desde las sombras de mi propio abismo.
[...]
Mi intelecto libré de pensar bajo, bañó el agua castalia el alma mía, peregrinó mi corazón y trajo de la sagrada selva la armonía.
Rubén Darío
No, todo esto no sucede en la realidad sino en el dominio de… ¿de un arte?, sí, de un artificio a través del cual surge una realidad delicadísima que pasa a existir en mí: la transfiguración me ha sucedido.
Me desarrollo sólo en lo actual. Hablo hoy —no ayer ni mañana—, pero hoy y en este mismo instante perecedero. Mi libertad pequeña y enmarcada me une a la libertad del mundo; pero ¿qué es una ventana sino el aire enmarcado por escuadras? Estoy ásperamente viva.
La incertidumbre de nuestros caminos nos atormentó toda la vida. ¿Qué podría decirte? Toda elección es pavorosa cuando se piensa en ella, como pavorosa es una libertad a la que no guía ya un deber. Es un camino que hay que elegir en un país completamente desconocido que cada cual debe descubrir; pero, fíjate bien, sólo puede hacerlo para sí mismo. De manera que el más incierto rastro en el África más ignorada es incluso menos incierto. Nos atraen las florestas umbrosas y los espejismos de los aún no agotados manantiales... mas los manantiales sólo estarán donde nuestros deseos los hagan fluir. Porque el país sólo existe a medida que lo configura nuestra proximidad y, conforme caminamos, el paisaje de los alrededores se va colocando poco a poco y no vemos el extremo del horizonte. Incluso lo que está a nuestro lado es sólo una sucesiva y modificable apariencia.
Los alimentos terrenales. André Gide